¿Al final de mes sólo ves números rojos en las cuentas a pesar de tener una nómina o pensión? Si sientes que las deudas pendientes están ahogando tu economía familiar, es el momento para plantearse la reunificación de deudas y pagar una única cuota mensual. Este mecanismo financiero supone reunificar préstamos, hipotecas, e impagos con las tarjetas de crédito o débito, entre otras, en una única cuota mensual. Esta será más reducida, por lo que el alivio financiero es evidente.

Las circunstancias en las que se ha suscrito la deuda definen las opciones para negociar las nuevas condiciones con las entidades de crédito para conseguir que esa única cuota mensual sea asequible a la situación financiera.

En el caso de que medie un avalista o se cuente con una vivienda con hipoteca, la unificación de deudas es más viable. No obstante, es posible reunificar deudas con avalista, aunque los requisitos impuestos exigen más al deudor.

El aval ante las deudas

Cuando hablamos de aval, nos referimos bien a una persona o sociedad jurídica, o bien a una entidad bancaria. En el caso del aval personal, la tercera persona se compromete a asumir el pago de la deuda del avalado en caso de que este no pueda afrontarla. Para ello responde con sus bienes en caso de que la situación financiera de su avalado resulte en un impago.

Si es un aval bancario, es la entidad financiera concesionaria quien asume el pago de la deuda a cambio de una comisión mensual.

Ahora bien, existe otro tipo de aval, no personalista, que también es interesante de cara a la reunificación de deudas. Hablamos de los bienes inmuebles y el patrimonio. Si dispone de una vivienda para utilizar como aval frente al pago, las condiciones, casi con toda seguridad, serán menos exigentes.

Estos también pueden colocarse en el contrato correspondiente como avales de solvencia, siempre y cuando el propietario acuda a la firma del documento y presente la documentación necesaria para comprobar a quién corresponde la propiedad.

Entre las propiedades que más se valoran para reunificar préstamos, aunque no son las únicas de cara a la aceptación como garantía, destacan las viviendas y el terreno.

Reunificar deudas con aval de casa

En el caso de que la propiedad con la que puedes negociar la reunificación de las deudas sea una vivienda será más fácil conseguir unas condiciones asumibles para el deudor. Es más, se puede unificar préstamos personales, gastos de las tarjetas de crédito e, incluso, cualquier tipo de producto financiero.

Aquí el inmueble actúa como aval que garantiza a la entidad que ofrece la reunificación préstamos que puede ‘cobrarse’ la deuda dejada por el cliente. Si necesitas ayuda para reunificar deudas, contacta con profesionales.

Así puedes reunificar deudas con aval y con hipoteca

En el caso de que cuentes con un aval inmobiliario, con o sin hipoteca sobre él, el sistema es el mismo: se ofrece una nueva hipoteca con condiciones más favorables, especialmente en cuanto a intereses, cuotas y tiempo para cumplir con la deuda contraída. De ahí que reunificar deudas con aval de casa sea una magnífica opción para personas que se encuentran en problemas de deuda a corto plazo.

Requisitos para reunificar con aval de vivienda

Aprovechar la vivienda como aval inmobiliario para reunificar deuda, aunque arriesgado, es una de las mejores opciones que podría tener cualquier deudor.

Si la vivienda ya cuenta con una hipoteca previa, la entidad bancaria concederá la reunificación de las deudas con aval inmobiliario siempre y cuando la nueva hipoteca no supere el 80% del valor de la vivienda. Este baremo se utiliza como principal, pero no único.

En la evaluación de riesgos de insolvencia para refinanciar deudas con aval se mira con lupa el nivel de ingresos, la procedencia de estos, y también todo lo que tiene que ver con el aval.

Por supuesto, cualquier entidad bancaria con la que se desee renegociar deudas con aval de casa revisará también la solvencia del aval propuesto, y si cualquiera de las dos partes está incluido en la lista de morosidad ASNEF.

E incluso si está en esta lista, se puede solicitar préstamos con garantía hipotecaria y proceder a la unificación de deudas con aval inmobiliario.

A esto se le suman dos nuevos requisitos:

  • Ser mayor de edad
  • Contar con una cuenta bancaria a su nombre, que será la cuenta de cargo de las cuotas reducidas por la intermediación.

Por supuesto, contar con una nómina o pensión, o en definitiva un ingreso recurrente con el que se pueda garantizar el pago de las cuotas mensuales de la deuda reunificada es imprescindible.

Documentación que aportar para tramitar la reunificación de la deuda con avalistas

Así las cosas, para la reunificación de deudas con avalista se ha de solicitar a la entidad bancaria correspondiente el préstamo hipotecario sobre el que se reorganizará la deuda con vivienda. A cambio de un importe menor en la cuota, los intereses se alargan y al final se paga más.

  • Para planificar la reunificación de deuda hay que contar con los gastos derivados: constitución de la nueva hipoteca, la tasa en el Registro de la propiedad, el notario, la gestoría y los impuestos. Y eso siempre y cuando en las negociaciones de la nueva hipoteca con la entidad bancaria no se ha de renunciar con los seguros de hogar y vida.
  • La documentación para presentar depende de la actividad económica en la que se englobe el deudor.

Para personas asalariadas se ha de presentar:

  • Las 3 últimas nóminas o la pensión
  • La declaración de la renta y la vida laboral
  • El contrato de trabajo
  • Una relación de los movimientos de cuentas o una cuota de seis meses.

La reunificación de deudas con aval de casa implica que existe más de una deuda pendiente de pago, mientras que la refinanciación de la deuda la reestructura, pero no genera una nueva hipoteca con diferentes condiciones (a favor del deudor). De hecho, la reunificación de deuda es una de las modalidades para refinanciar deudas con aval de casa que ofrecen las entidades de crédito.

En cuanto a los autónomos, deberán presentar:

  • La declaración del IVA y el IRPF del año anterior
  • La vida laboral
  • Los movimientos de cuentas en los últimos seis meses

Por último, los pensionistas han de presentar junto a la declaración de la Renta, el informe anual de ingresos de la Seguridad Social, y el pago de 6 meses de cuota por adelantado, una cantidad pactada o los movimientos de la cuenta.

En cualquier caso, habrá que organizar y planificar disponer de todos los datos de la vivienda que ejerce como aval en la negociación con la entidad bancaria para mejorar las condiciones actuales: un tipo de interés más asequible, con una única cuota mensual a la que se puede hacer frente, y tiempo más extenso para cumplir con la deuda.

Contacta con nosotros

El proceso de solicitud de la reunificación de deuda con avalista, ya sea inmobiliario o a través de un préstamo personal, supone un gran esfuerzo en tiempo y coordinación entre avalista, entidad y solicitante.

Existe una forma más rápida, eficaz y económica de conseguir reunificar las deudas con aval: llámanos o solicita una primera reunión sin compromiso y te explicaremos cómo podemos ayudarte a conseguir la reunificación de las deudas con aval si dispone de una vivienda, con o sin hipoteca o si es una unificación de deudas sin aval.

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